El joven se encontraba en su casa con un grupo de amigos cuando tomó el remedio para, supuestamente, tener alucinaciones y grabarse. Dianna Stevens, la abuela de Jacob, contó que los amigos de su nieto se asustaron cuando vieron que Jacob empezaba a convulsionar y “salieron corriendo”.
Jacob fue trasladado de urgencia al hospital, donde los médicos advirtieron a su familia que tal vez nunca se despertaría, ya que había sido “demasiado para su cuerpo”. Sufrió muerte cerebral y estuvo seis días en el hospital hasta que le sacaron el soporte vital este miércoles.
“Nos dijeron que podíamos mantenerlo conectado, pero que nunca abriría los ojos, que nunca respiraría, sonreiría, caminaría o hablaría”, dijo el padre de Jacob, Justin Stevens, tras la tragedia.
El hombre también difundió una foto de Jacob conectado a un respirador para concientizar sobre los peligros de los retos virales. “Estén atentos a lo que hacen sus hijos en el celular”, le advirtió a otras familias.
“Hablen con ellos de eso. Quiero que todos sepan lo que le pasó a mi hijo”, agregó Justin.

“Tratamos de decirle que se mantuviera alejado de TikTok. No lo queríamos en TikTok. Hay cosas allí que son buenas, pero también hay cosas que son malas”, dijo su abuela, Dianna Stevens.

La mujer contó que el nene pasaba cada vez más tiempo en su teléfono, viendo videos en YouTube y TikTok y que habían notado cambios en su comportamiento.

“Una cosa que me gustaría hacer llegar a los padres y abuelos: si conocen a sus hijos, si ven el más mínimo cambio, si comienzan a alejarse de ustedes... sería cautelosa”, aconsejó.

“Haré todo lo posible para asegurarme de que otro niño no pase por eso”, cerró la mujer entre lágrimas, mientras desde la red social de videos cortos trasmitieron a la familia sus “más profundas condolencias” y condenaron estas prácticas en la plataforma.