Hace 3 años, el Gobierno de Alberto Fernández imponía el Aislamiento Social Preventivo y Obligatorio en toda la Argentina para evitar la circulación y el contagio del virus COVID-19. La cuarentena provocó que la economía cayera en el 2020 un 9,9%, pero permitió que los hospitales no colapsaran como sucedió en otros países de la región como Brasil y, además, hubo respiradores mecánicos para todos los pacientes en las terapias intensivas.

«A todos los argentinos y argentinas a partir de las 0 horas de mañana deberán someterse a un aislamiento social preventivo y obligatorio. Esto quiere decir que, a partir de ese momento, nadie puede moverse de su residencia, todos tienen que quedarse en sus casas. Es hora de que comprendamos que estamos cuidando la salud de los argentinos. Esta medida la hemos dictado ahora tratando de que los efectos sobre la economía sean los menos dañinos posibles», expresó el presidente de la Nación en un comunicado oficial junto a Omar Perotti, Axel Kicillof, Horacio Rodríguez Larreta y Gerardo Morales.

«Para que de ese modo tengamos todos estos días la posibilidad de quedarnos en nuestras casas y evitar seguir trasladando el virus de persona a persona. Van a seguir teniendo los negocios de cercanía abiertos, van a poder a los almacenes, los supermercados, farmacias, ferreterías…, pero entiéndase que la Prefectura, la Gendarmería, la policía federal y las policías provinciales estarán controlando quién circula por el país», señaló Fernández.

«Entiéndase que aquel que no pueda explicar qué está haciendo en la calle se verá sometido a las sanciones que el código penal prevé… vamos a ser absolutamente inflexibles. Les aseguro que me voy a poner al frente para poder garantizar y evitar que el ritmo del contagio se acelere de tal modo que el sistema sanitario argentino no lo pueda atender», insistió el mandatario argentino.

«Hemos previsto un plan en el cual manteniendo distancia entre nosotros, teniendo los cuidados de los que estamos hablando y guardándonos en nuestras casas, vamos a evitar que el virus se propague y si se propaga, porque se va a propagar, que sea más lentamente», explicó el líder del Frente de Todos ante un grupo de periodistas acreditados. La cuarentena estricta se extendió en primera instancia por 15 días y luego fue renovándose hasta llegar al final el 7 de noviembre tras 155 días.